martes, 24 de mayo de 2011

La Compasión es el Ingrediente Clave para una Vida Feliz - II Parte





For English language please go to: Compassion is the Key Ingredient to a Happy Life (II)


The Bali Times, Indonesia [De la serie del Dalai Lama]
25 de abril 2011

Debido a que el 14º Dalai Lama del Tíbet se prepara para retirarse de la política, "The Bali Times" está publicando una serie de artículos de Su Santidad, con sus pensamientos y enseñanzas. Este es el segundo de un artículo en dos partes.


Debemos tener claro lo que queremos decir por compasión. Muchas formas de sentimiento compasivo se mezclan con el deseo y el apego. Por ejemplo, el amor que los padres sienten por su hijo está a menudo fuertemente asociado con sus propias necesidades emocionales, por lo que no es del todo compasivo. Una vez más, en el matrimonio, el amor entre marido y mujer - sobre todo al principio, cuando cada uno aún no conoce muy bien el verdadero carácter del otro - depende más del apego que del amor verdadero. Nuestro deseo puede ser tan fuerte, que la persona a la que estamos apegados parece ser buena, cuando en realidad él o ella es muy negativo/a. Además, tenemos una tendencia a exagerar las pequeñas cualidades positivas. Así, cuando la actitud de la pareja cambia, el otro se siente a menudo decepcionado y él o ella también cambia de actitud. Esta es una indicación de que el amor ha sido motivado más por una necesidad personal, que por el cuidado genuino de la otra persona.

La verdadera compasión no es sólo una respuesta emocional, sino un firme compromiso fundamentado en la razón. Por lo tanto, una actitud verdaderamente compasiva hacia los demás no cambia incluso si éstos se comportan negativamente.

Por supuesto que el desarrollo de este tipo de compasión no es nada fácil. Para empezar, consideremos los siguientes hechos:

Ya sea que la gente sea hermosa y agradable, o desagradable y perjudicial; en última instancia, son seres humanos, al igual que uno mismo. Así como uno mismo, ellos también quieren la felicidad y no el sufrimiento. Por otra parte, su derecho a superar el sufrimiento y ser felices es igual que el de uno mismo. Ahora, al reconocer que todos los seres son iguales tanto en su deseo de felicidad y en su derecho a obtenerlo, automáticamente sientes empatía y cercanía por ellos. A través de habituar a tu mente a este sentido de altruismo universal, a desarrollar un sentimiento de responsabilidad hacia los demás: el deseo de ayudarlos activamente a superar sus problemas. Tampoco es este deseo selectivo y se aplica por igual a todos. Mientras que ellos son seres humanos que experimentan placer y dolor igual que tú, no hay ninguna base lógica para discriminar entre ellos o para alterar tu preocupación por ellos si se comportan negativamente.

Quisiera enfatizar que está a tu alcance, con paciencia y tiempo, el desarrollar este tipo de compasión. Por supuesto, nuestro egoísmo, nuestro apego característico al sentimiento de ser una persona independiente, auto-existente, trabaja fundamentalmente para inhibir nuestra compasión. De hecho, la verdadera compasión sólo puede experimentarse cuando este tipo de aferramiento propio es eliminado. Pero esto no significa que no podamos comenzar y avanzar ahora.

UN COMIENZO

Debemos empezar por la eliminación de los mayores obstáculos a la compasión: la ira y el odio. Como todos sabemos, estas son emociones muy poderosas y pueden inundar toda nuestra mente. Sin embargo, pueden ser controladas. Sin embargo, si no es así, estas emociones negativas nos invaden - sin ningún esfuerzo adicional de su parte - e impiden nuestra búsqueda de la felicidad de una mente amorosa.

Así que para empezar, es útil investigar si la ira tiene valor o no. A veces, cuando estamos desanimados por una situación difícil, la ira aparenta ser útil, trayendo con ella más energía, confianza y determinación.

Aquí, sin embargo, debemos examinar cuidadosamente nuestro estado mental. Si bien es cierto que la ira trae más energía, si exploramos la naturaleza de esta energía, se descubre que es ciega: no podemos estar seguros de si su resultado será positivo o negativo. Esto se debe a que la ira eclipsa la mejor parte de nuestro cerebro: su racionalidad. Así que la energía de la ira es casi siempre poco fiable. Puede causar una inmensa cantidad de comportamiento destructivo, lamentable. Por otra parte, si aumenta la ira hasta el extremo, uno se vuelve como un loco, que actúan en formas que son tan perjudiciales para uno mismo como para los demás.

Es posible, sin embargo, desarrollar una energía igual de contundente, pero mucho más controlada con la cual manejar situaciones difíciles.

Esta energía controlada proviene no sólo de una actitud compasiva, sino también de la razón y la paciencia. Estos son los antídotos más poderosos para la ira. Desafortunadamente, muchas personas juzgan mal estas cualidades y las ven como signos de debilidad. Creo que lo opuesto es verdadero: que éstos son los verdaderos signos de fortaleza interior. La compasión es por naturaleza suave, apacible y flexible pero muy poderosa. Son los que pierden fácilmente la paciencia los que se sienten inseguros e inestables. Por lo tanto, para mí, el surgimiento de la ira es una señal directa de debilidad.

Así que en cuanto surja un problema, trata de ser humilde y mantén una actitud sincera y preocúpate de que el resultado sea justo. Por supuesto, otros pueden tratar de aprovecharse de tí, y si el permanecer desapegado sólo alienta la agresión injusta, adopta una posición firme. Esto, sin embargo, se debe hacer con compasión y si es necesario expresar tus puntos de vista y tomar fuertes medidas, hazlo sin ira o mala intención.

Debes darte cuenta que a pesar de que tus oponentes parecen estar haciéndote daño, al final, su actividad destructiva los daña a sí mismos. Con el fin de revisar tus impulsos egoístas de tomar represalias, debes recordar tu deseo de practicar la compasión y asumir la responsabilidad de ayudar a evitar que la otra persona sufra las consecuencias de sus actos.

Por lo tanto, debido a las medidas que utilizas tienen que ser elegidas con calma, éstas serán más eficaces, más precisas y contundentes. La represalia basada en la energía ciega de la ira, rara vez da en el blanco.

AMIGOS Y ENEMIGOS

Debo recalcar una vez más que sólo pensar en que la compasión, la razón y la paciencia son buenas, no será suficiente para desarrollarlas. Debemos esperar a que las dificultades surjan y luego tratar de ponerlas en práctica.

¿Y quién crea esas oportunidades? No nuestros amigos, por supuesto, sino nuestros enemigos. Ellos son los que nos dan más problemas. Así que si realmente queremos aprender, debemos considerar a nuestros enemigos como nuestros mejores maestros.

Para una persona que valora la compasión y el amor, la práctica de la tolerancia es esencial, y para lo cual el enemigo es indispensable. Así que debemos sentirnos agradecidos con nuestros enemigos, porque son ellos los que mejor nos puede ayudar a desarrollar una mente tranquila. Además, a menudo es el caso tanto en la vida personal y pública que con un cambio de circunstancias, los enemigos se convierten en amigos.

Así que la ira y el odio siempre son dañinos, y a menos que entrenemos nuestras mentes y trabajemos para reducir su fuerza negativa, éstas nos seguirán perturbando y alterando nuestros intentos de desarrollar una mente calmada. La ira y el odio son nuestros verdaderos enemigos. Estas son las fuerzas que más necesitamos enfrentar y derrotar, no los enemigos temporales que aparecen de forma intermitente durante toda la vida.

Por supuesto, es natural y correcto que todos querramos tener amigos. A menudo bromeo que si realmente quieres ser egoísta, deberías ser muy altruista. Tienes que cuidar bien a los demás, preocuparte por su bienestar, ayudarlos, servirles, hacer más amigos, crear más sonrisas. ¿El resultado? Cuando necesites ayuda, encontrarás muchos ayudantes. Si, por otro lado, descuidas la felicidad de los demás, en el largo plazo, serás el perdedor. ¿Y será que la amistad es producida a través de las querellas y la ira, los celos y la intensa competitividad? No lo creo así. Sólo el afecto nos trae amigos cercanos genuinos.

En la sociedad materialista de hoy, si tienes dinero y poder, pareces tener muchos amigos. Pero no son amigos tuyos, son los amigos de tu dinero y poder. Cuando pierdes tu riqueza e influencia, te resultará muy difícil encontrar a estas personas.

El problema es que cuando las cosas en el mundo van bien para nosotros, nos confiamos que podemos manejarlo nosotros mismos y sentimos que no necesitamos amigos, pero a medida que nuestro estatus y la salud se deterioran, rápidamente nos damos cuenta de lo equivocados que estábamos. Ese es el momento en que nos damos cuenta de quién es realmente útil y quién es completamente inútil. Así que para prepararse para ese momento, el hacer amigos genuinos que nos ayudarán cuando sea necesario, es que nosotros mismos debemos cultivar el altruismo.

Aunque a veces la gente se ríe cuando lo digo, yo siempre quiero más amigos. Me encantan las sonrisas. Debido a esto me ocupo de conocer cómo hacer más amigos y cómo conseguir más sonrisas - en particular, sonrisas genuinas. Porque hay muchos tipos de sonrisa, como la sonrisa sarcástica, artificial o diplomática. Muchas sonrisas no producen sensación de satisfacción, y a veces incluso pueden despertar sospechas o temor, ¿no es así? Sin embargo, una sonrisa sincera que realmente nos dé una sensación de frescura y es, creo, única en los seres humanos. Si estas son las sonrisas que queremos, entonces nosotros mismos debemos crear las razones para que aparezcan.

LA COMPASIÓN Y EL MUNDO

En conclusión, me gustaría brevemente ampliar mis pensamientos más allá del tema de este breve fragmento y ampliar más un punto: la felicidad individual puede contribuir de una manera profunda y eficaz a la mejora general de nuestra comunidad humana.

Debido a que todos compartimos una misma necesidad de amor, es posible que sintamos que alguien que nos encontremos, en cualquier circunstancia, es un hermano o hermana. No importa que tan nueva sea la cara o lo diferente del vestido y el comportamiento, no hay una división significativa entre nosotros y otras personas. Es absurdo insistir en las diferencias externas, ya que nuestra naturaleza básica es la misma.

En última instancia, la humanidad es una y este pequeño planeta es nuestro único hogar. Si vamos a proteger a este hogar nuestro, cada uno de nosotros necesita experimentar una sensación intensa de altruismo universal. Es sólo este sentimiento que puede quitar los motivos auto-centrados que hacen que las personas se engañen y se utilicen unas a otras.

Si tienes un corazón sincero y abierto, naturalmente tendrás buena autoestima y confianza, y no tienes por qué sentir miedo de los demás.

Creo que en todos los niveles de la sociedad - familiar, tribal, nacional e internacional - la clave para un mundo más feliz y más exitoso es el incremento de la compasión. No necesitamos ser religiosos, ni tenemos necesidad de creer en una ideología. Todo lo que se necesita es que cada uno de nosotros desarrollemos nuestras buenas cualidades humanas.

Yo intento tratar como un viejo amigo a todo aquel con que me encuentre. Esto me da una sensación genuina de felicidad. Esta es la práctica de la compasión.

Traducido al español por Lorena Wong.

------------------------------ -------------------------

Tsewang Phuntso
Oficial de Enlace para America Latina
OFICINA DEL TIBET
241 East 32nd Street
New York, NY 10016

Telefono: (212) 213 5010 extn. 11
Fax: (212) 779 9245
Email: phuntso@igc.org

Por más información sobre Tíbet en español, por favor visite nuestro sitio webwww.tibetoffice.org/sp o subscríbase a nuestro boletín "Noticias del Tíbet", escribiendo a la dirección indicada más arriba.

lunes, 16 de mayo de 2011

La Confusión y la calma de mente - Geshe Ngawang Sherap




Geshe Ngawang Sherap nació en Lhasa, Tibet el 1º de julio de 1948. Ingresó al monasterio de Sera en Lhasa a la edad de siete años. Tras la invasión china al Tibet en 1960, se refugió con su familia en la India, donde continuó sus estudios modernos y de budismo en varios institutos como el Instituto Central de Altos Estudios Tibetanos y la Universidad de Sánscrito en Benares con la obtención de la Licenciatura y la Maestría  en Estudios de Budismo Tibetano. Obtuvo el título de Geshe (Doctorado de seis años de estudio) en Filosofía Budista Tibetana en el colegio principal de la Universidad Monástica de Sera en 1991.
Es un reconocido conferenciante internacional y anualmente visita diversos países entre los que se cuentan: India, Nepal, Bután, Mongolia, China, Tailandia,  Malasia, Singapur, Indonesia, Suiza, Alemania, Italia, Dinamarca, Suecia, España, Holanda, Bélgica, Inglaterra, Argentina, Brasil, Chile, Uruguay, Venezuela y varios estados de los Estados Unidos.


Gheshe Ngawang Sherap Puede describir ¿qué es confusión?
¿Qué entiende por confusión?
Ausencia de calma.
¿Qué es ausencia de calma?

Hay gente que tiene más confundida que otra, de qué depende? de la diferencia del camino espiritual, o si tienen una vida común diferente?
Primero tendríamos que diferenciar ¿qué es una vida común?

Muchos pensamientos.
Nosotros tomamos muchas cosas al mismo tiempo.Podemos separar una vida espiritual o vida común.
¿Cómo los separa?

La vida espiritual es la de la persona que practica y la vida común no.
¿Qué es práctica?(risas)

Práctica es orden.
¿Entonces regular o común no es orden?

En ciertos aspectos no tiene orden y en otros sí.
¿Qué es tener orden?

Orden sería vivir bajo preceptos, algunas reglas, pero no les prestamos atención.
Para Ud. ¿esto es orden?, Entonces ¿qué sería no-orden?

Quebrarlas.
Entonces ¿Qué sería práctica espiritual?

Seguir y tener encuentra los preceptos.
¿En la vida común tenemos esto?

Sí. (risas)
Hemos vuelto al principio. (risas). Ud. ha dicho normal, esto quiere decir que hay algo que no tiene orden, que es normal, ¿porque hacemos esta separación? ¿Acaso la vida espiritual no es normal? Cuando hablas de vida diaria o normal, estás enunciando que la vida espiritual no es normal, no es diaria.

Me arrepiento de la separación que hice anteriormente...(risas)
Este es el punto de nuestras preguntas y respuestas… Ahora Ud. tiene que cambiar su visión, al darse cuenta que no es como pensaba. Esto es lo que normalmente hacemos sin entender, por eso cuando lo clasificamos se da cuenta que la posición que había tenido no era la correcta.

Se nota la diferencia entre la gente que lleva una vida espiritual activa, del que no la lleva?, No conozco a nadie.
Si no conoce a nadie, ¿Por qué pregunta? ¿Por qué necesita preguntar?

Por que sería una aspiración tener un estado de no-confusión.
Pero si no lo conoce! ¿Por qué necesita saberlo?

Sería una meta.
Pero si no lo sabe ¿cómo lo puede poner como meta?

Tener un estado de calma mental, sería un buen estado en el que vivir.
Pero entonces sabe algo, no puede decir que no sabe.

Bueno, algo sé. (risas)
Ud. tiene esa experiencia en que no hay tanta confusión, no puede decir que no sabe, Ud. Mismo experimenta algo, por eso pregunta, si no sabe no puede preguntar. Quiere saber más, si no supiera nunca preguntaría, ahí hay un error.
Mucha gente no sabe y por eso no pregunta, Ud. pregunta por que sabe un poco. Esto es confusión. (risas)

Entonces ¿Cuál sería la mejor práctica, la más eficaz, para lograr más espacios de paz mental? Además de la meditación de la cual habló en las conferencias.
¿Cómo clasificaría los espacios o intervalos…? Cómo cuando tiene una hora de actividad, un descanso, otra hora de actividad, Ud. llama espacio o intervalo a la no-actividad.

Llamo intervalo al tiempo que puedo tener de calma mental.
¿Pero qué es intervalo? ¿Cuando no hace nada? ¿Eso es intervalo?

Tiempo.
Las 24 horas hay tiempo, no hay un momento sin tiempo.

Tener más tiempo.
No puede tener más tiempo, siempre es el mismo tiempo.

Sí, pero en 24 horas puedo tener 5 minutos o 1 hora de calma mental.
También puede tener 24 horas de calma mental!!!

¿Cómo lo hago?
No debe tener confusión, eso es todo. Pero Ud. Está planteando tener más intervalos, no deshacerse de la confusión. Como ahora tiene tanta confusión, quiere tener intervalos en esta confusión, eso es lo que quiere. (risas) ¿Por qué no tener todo el tiempo calma mental?, Tiene apego a la confusión, lo único que quiere es tener un poquito menos (risas), nos gusta la calma pero le tenemos miedo, porque no entendemos qué es calma mental. ¿En este momento tenemos calma?

Ud. sí, yo no.
¿Por qué no? Ud. habla, yo hablo, Ud. piensa, yo pienso, estamos haciendo la misma actividad, ¿Por qué dice que yo estoy en calma y Ud. no?

Ud. la tiene más clara.
¿Porqué Ud. no la tiene clara?

Buena pregunta.
Ud. dice que yo lo veo claro y Ud. no, y se queda con esa idea, y por mantener esta postura no se clarifica.

¿Cómo sostiene su calma mental?
Creo que todavía hay confusión en su pregunta. Cuando te sientas en esa silla, no te sientas en otra, no puedes estar en dos sitios a la vez ¿Entiende?, Si habla, no puede estar en silencio, y cuando está en silencio no puede estar hablando. Nosotros queremos todo al mismo tiempo, si la mente está haciendo una cosa, quiere hacer muchas cosas al mismo tiempo, sin poder tener una cosa sola a la vez y continuamente cuando hablamos de calma, nos referimos a prestarle y mantener la atención en una cosa a la vez.
Por ejemplo un espejo, capta la imagen, una a la vez, y no puede tener todas las imágenes a la vez. Si Ud. piensa en la calma como no-actividad está equivocada; menos actividad, sí. El espejo siempre está reflejando una imagen a la vez.

Y ¿Cuándo no hay luz?
¿Ud. piensa que no refleja la oscuridad? El espejo siempre tiene actividad, si lo dejas en este lugar (Geshe coloca el espejo boca abajo, contra el sillón) proyectará esta imagen tanto como Ud. lo deje, 1 hora o 24 horas, en ese sentido nuestra mente tendrá calma si tiene menos actividad, una cosa a la vez, en vez de correr detrás de tantos objetos simultáneamente. El cuerpo puede estar sentado pero la mente nunca se detiene. Ud. no puede tener o hacer muchas cosas a la misma vez. Cuando tenemos el día queremos la noche, cuando hay frío queremos el calor o al revés. ¿Por qué vamos detrás de tantas cosas? Ese es el deseo, mientras tengamos tantos deseos, no hay calma, por eso hay que reducir los deseos ¿Entiende?.

Sí, perfecto.
Es muy simple, pero no lo queremos aceptar.

¿Cómo reducimos el deseo?
No hay propósito en correr detrás de tantas cosas. Nosotros creemos que tiene propósito, por eso nos pasamos mirando la televisión para ver qué viene después de cada imagen, le ponemos interés, le damos un propósito y ahí creamos nuestra confusión. Sí alguien le dice que hay un nuevo shopping, Ud. crea el interés de ir a visitarlo, va a ver qué bonito es, todas las cosas nuevas cosas que tiene, va una vez, y después va otra vez y sigue volviendo, dejando de hacer otras cosas ¿Cuál es este propósito de ver las cosas una y otra vez?, Siempre deseando, su mente no tiene calma. Si esto no le causa ningún problema, puede seguir haciéndolo, pero si un niño lo hace una y otra vez, no podrá estudiar, por eso no le permitimos jugar todo el tiempo. Sí nos gusta ir tanto a los shopping, ¿por qué no conseguimos un trabajo en ese lugar? Entonces ya no sería nuestro problema... (risas)
¿Por qué nosotros hacemos esto? ¿Hay necesidad de hacer esto?, Cuanto menos necesidad tengamos de correr detrás de los objetos, más calma tendremos. Cada vez que quiera hacer algo, observe por qué lo quiere hacer.
Cuando decimos que no deberíamos tener deseos, a mucha gente no le gusta, pero el deseo es la causa de todos los problemas, pero aún así no lo queremos aceptar, este es nuestro problema, creemos que sin deseos no podemos funcionar. Pero Ud. puede observar que los objetos pueden funcionar sin deseos, entonces ¿Cómo nosotros no vamos a poder?. Nosotros pensamos, por equivocación, que cualquier cosa que hacemos es por el deseo. No es difícil ver esto, nosotros lo hacemos difícil.
Para Ud. el idioma español no es difícil, por que lo habla. Para Ud. ni siquiera existe la pregunta de si es difícil o no.

¿Cómo saber que uno esta en el camino correcto?
¿Cómo saber que uno esta en el camino incorrecto?

No reconocería ninguno de los dos.
¿Entonces por qué tiene la necesidad de hacer estas preguntas? ¿Por qué preguntamos sin entender? Mucha gente lo hace y no hay necesidad, no tiene sentido preguntar, si lo sé, lo sé, si no lo sé, no lo sé, yo sé que no sé hablar español, es claro, no necesito preguntar.

Pero sí Ud. esta aprendiendo, ¿Cómo sabe si está aprendiendo correcta o equivocadamente?.
No hay pregunta de correcto o equivocado, primero tiene que estudiar, para saber si es correcto o no, antes de estudiar esta cuestión no existe. Haga la pregunta una vez más.

¿Cómo saber sí mis conceptos están claros en función de lo que sé sobre la calma mental?
Ahora está poniendo algo de contenido, antes preguntó sin ningún contenido. Ahora, no está repitiendo la pregunta si no que está haciendo otra pregunta. (risas). ¿Se da cuenta cómo hacemos preguntas sin pensar?

No nos damos cuenta y funcionamos...
Eso es confusión, nosotros vamos haciendo y diciendo, muchas cosas sin saber qué es realmente lo que hacemos, la gente va apurada, y no sabe adónde va. (risas)

Entonces, calma mental sería menos cantidad de pensamientos, no-pensamiento, orden en los pensamientos….
Haga aquello que hace, y no muchas cosas al mismo tiempo, lo que sea necesario hacer, solo eso, cuando coma, coma, si cocina, cocine, si lee ponga la mente en la lectura, si está conversando, ponga la atención en el sentido de la conversación. Si pregunta coloque la mente en la pregunta, coloque la mente en la acción que efectúa en ese momento, eso es todo.

¿Tan fácil como eso?
Fácil; por esa razón la gente no lo comprende. Para comprender esto, piensan que tienen que aprender algo muy complicado, que van a tener que hacer muchas cosas. Cuando dice algo tan simple, no lo entienden. En Detroit, una periodista me preguntó acerca de las conferencias, yo le dije que hablaría de cómo ser feliz, y ella me preguntó cómo podía lograr esto. Yo le contesté "piense claro, no espere muchas cosas, siéntase bien", y ella dijo: "Ah!! Tan simple!!".
Entonces miró el reloj y se excusó por que se debía marchar, tan rápido se quedó sin tiempo, eso quiere decir que no era fácil para ella, solo lo aceptó de la boca para afuera, no experimentó el momento, no se relajó, no digirió el pensamiento, solamente se fue corriendo, como siempre lo hacemos, saltando de una cosa a la otra, sin darnos tiempo de hacerla propia.
Ahora puede fijarse cuántas preguntas hizo, y cuántas tienen correlación, si fue profundizando, con cada pregunta, no se olvide que cada pregunta es un deseo, por eso pregúntese por qué pregunta lo que pregunta. Cuando la respuesta aparezca dentro suyo, esa es la verdadera respuesta y no lo que yo dije.

No más preguntas. (risas)
Por qué?

Por que tengo que pensar en todo lo anterior...


Quiero agradecer a Geshe por transformar esta entrevista en una gran enseñanza para mí... M. Magazian.

Fuente:
Volver a Mantra
www.mantra.com.ar





Atención Buenos Aires, me informaron que Geshe Ngawang Sherap nos visitará la primer quincena de Julio, de este año 2011, cuando esté el cronograma de enseñanzas lo voy a publicar en este blog y en la página de Facebook
http://www.facebook.com/pages/Buda/193847823963188

En este enlace tambien hay información sobre la visita a Chile
http://www.parcelaluna.cl/index.php?option=com_content&view=article&id=159:z

Si alguien tiene datos sobre la visita a algún otro país, por favor envíenme la información para publicarla.

Saludos
Daniel

sábado, 7 de mayo de 2011

La Compasión es el Ingrediente Clave para una Vida Feliz - I Parte


 
The Bali Times, Indonesia [De la serie del Dalai Lama]
18 de abril 2011 

For English language please go to Compassion Is the Key Ingredient to a Happy Life 

Debido a que el 14º Dalai Lama del Tíbet se prepara para retirarse de la política, "The Bali Times" está publicando una serie de artículos de Su Santidad, con sus pensamientos y enseñanzas. 

Una gran pregunta subyace en nuestra experiencia, si lo pensamos bien, conscientemente o no: ¿Cuál es el propósito de la vida? He examinado esta interrogante y me gustaría compartir mis pensamientos con la esperanza de que puedan ser de beneficio directo y práctico a los que los lean.

Creo que el propósito de la vida es ser feliz.  Desde el momento del nacimiento, cada ser humano desea la felicidad y no quiere el sufrimiento. Ni el condicionamiento social, ni la educación, ni la ideología afectan esto. Desde el corazón mismo de nuestro ser, simplemente deseamos el bienestar.  No sé si el universo, con sus incontables galaxias, estrellas y planetas, tiene un significado más profundo o no, pero por lo menos, está claro que los seres humanos que vivimos en esta tierra enfrentamos la tarea de crear una vida feliz para nosotros mismos. Por lo tanto, es importante descubrir lo que va a lograr el mayor grado de felicidad.

Para empezar, es posible dividir toda clase de felicidad y sufrimiento en dos categorías principales: mental y física. De las dos, es la mente la que ejerce la mayor influencia en la mayoría de nosotros. A menos que estemos gravemente enfermos o privados de las necesidades básicas, nuestra condición física juega un papel secundario en la vida. Si el cuerpo está bien, prácticamente lo ignoramos.  La mente, sin embargo, registra cada acontecimiento por pequeño que sea. Por lo tanto debemos dedicar nuestros más serios esfuerzos para lograr la paz mental.

Desde mi propia y limitada experiencia, he encontrado que el mayor grado de tranquilidad interior proviene del desarrollo del amor y de la compasión.

Cuanto más nos preocupemos por la felicidad de los demás, mayor será nuestro propio sentido de bienestar.  Cultivando un cercano y cálido sentimiento por los demás, automáticamente ponemos la mente en calma.  Esto ayuda a eliminar cualquier temor o inseguridad que podamos tener, y nos da la fortaleza para enfrentar los obstáculos que encontremos. Es la fuente fundamental del éxito en la vida.

Mientras vivamos en este mundo estamos obligados a encontrar problemas. Si, en un momento, perdemos la esperanza y nos desalentamos; disminuimos nuestra capacidad para afrontar las dificultades. Si, por otro lado, recordamos que no somos sólo nosotros, sino que todos tienen que pasar por el sufrimiento, esta perspectiva más realista aumentará nuestra determinación y capacidad para superar los problemas.  De hecho, con esta actitud, ¡cada nuevo obstáculo puede ser visto como otra oportunidad valiosa para mejorar nuestra mente!

Así pues, podemos esforzarnos gradualmente en ser más compasivos, es decir, podemos desarrollar una simpatía genuina por el sufrimiento de los demás, y la voluntad para ayudarlos a eliminar su dolor. Como resultado, nuestra propia serenidad y fuerza interior aumentará.


NECESIDAD DE AMOR

En última instancia, la razón por la cual el amor y la compasión traen mayor felicidad, es simplemente porque nuestra naturaleza los valora por encima de todo. La necesidad de amor se encuentra en la base misma de la existencia humana. Es el resultado de la profunda interdependencia que compartimos unos con otros. Sin embargo aunque un individuo pueda ser capaz y hábil, estando solo, él o ella no va a sobrevivir. A pesar de lo vigoroso e independiente que uno se pueda sentirse durante los períodos más prósperos de la vida, cuando uno está enfermo, es muy joven o muy viejo uno debe depender del apoyo de los demás.

La interdependencia, por supuesto, es una ley fundamental de la naturaleza. No sólo las formas superiores de vida, sino también muchos de los insectos más pequeños son seres sociales que, sin ningún tipo de religión, de derecho o de educación sobreviven mediante la cooperación mutua, sobre la base de un reconocimiento innato de su interconexión. El nivel más sutil de los fenómenos materiales también se rige por la interdependencia. Todos los fenómenos del planeta que habitamos, desde los océanos, las nubes, los bosques y las flores que nos rodean, surgen dependiendo de patrones sutiles de energía. Sin su adecuada interacción, éstos se disuelven y menguan.

Debido a que nuestra propia existencia humana es tan dependiente de la ayuda de otros, nuestra necesidad de amor se convierte en la base misma de nuestra existencia. Por tanto, necesitamos un verdadero sentido de responsabilidad y una preocupación sincera por el bienestar de los demás.

Tenemos que considerar lo que los seres humanos somos en realidad. No somos como objetos hechos a máquina. Si fuéramos entidades meramente mecánicas, entonces las máquinas mismas podrían aliviar todos nuestros sufrimientos y colmar nuestras necesidades.

Sin embargo, puesto que no somos criaturas únicamente materiales, es un error poner todas nuestras esperanzas de felicidad solamente en el desarrollo externo. En su lugar, deberíamos considerar nuestros orígenes y naturaleza para descubrir lo que necesitamos.

Dejando de lado la compleja cuestión de la creación y evolución de nuestro universo, podemos al menos estar de acuerdo en que cada uno de nosotros es el producto de nuestros propios padres. En general, nuestra concepción tuvo lugar no sólo en el contexto del deseo sexual, sino de la decisión de nuestros padres para tener un hijo. Estas decisiones se basan en la responsabilidad y el altruismo - el compromiso compasivo de los padres atender a su hijo hasta que sea capaz de cuidar de sí mismo. Así que, desde el momento mismo de nuestra concepción, el amor de nuestros padres existe directamente desde nuestra creación.

Por otra parte, dependemos totalmente de los cuidados de nuestras madres desde las primeras etapas de nuestro crecimiento. Según algunos científicos, el estado mental de una mujer embarazada, ya sea tranquila o agitada, tiene un efecto físico directo sobre su hijo por nacer.

La expresión de amor es también muy importante en el momento del nacimiento. Ya que la primer cosa que hacemos es succionar leche del pecho de nuestra madre, naturalmente nos sentimos cercanos a ella, y ella debe sentir amor por nosotros para poder alimentarnos adecuadamente; si siente rabia o resentimiento, su leche no puede fluir libremente.
Luego está el período crítico del desarrollo cerebral, desde el momento del nacimiento hasta por lo menos a la edad de tres o cuatro años, tiempo durante el cual el contacto físico amoroso es el factor más importante para el crecimiento normal del niño. Si el niño no es cargado, abrazado, acariciado, o amado; su desarrollo se verá afectado y su cerebro no madurará correctamente.

Puesto que un niño no puede sobrevivir sin el cuidado de los demás, el amor es su alimento más importante. La felicidad de la infancia, la de calmar los muchos temores de los niños y el desarrollo saludable de la confianza en sí mismos, dependen directamente del amor.

Hoy en día, muchos niños crecen en hogares infelices. Si no reciben el afecto adecuado, más tarde en la vida raramente podrán amar a sus padres y, no pocas veces, les será difícil amar a los demás. Esto es muy triste.

Cuando los niños crecen y entran a la escuela, su necesidad de apoyo deben ser colmado por sus maestros. Si un maestro no sólo imparte educación académica, sino que también asume la responsabilidad de preparar a los estudiantes para la vida, sus alumnos sentirán confianza y respeto; y lo que se les haya enseñado dejará una impresión indeleble en sus mentes. Por otra parte, las materias enseñadas por un maestro que no muestra verdadera preocupación por el bienestar general de alumnos, se considerará temporal y no será retenido por mucho tiempo.

Del mismo modo, si uno está enfermo y está siendo tratado en el hospital por un médico que pone en evidencia la sensación de calidez humana, uno se siente a gusto; y el deseo de los médicos de dar la mejor atención posible de por sí es curativa, con independencia del grado de su habilidad técnica. Por otro lado, si un doctor carece de sensibilidad humana y muestra una expresión hostil, de impaciencia o indiferencia, uno se siente ansioso, aunque él o ella sea el médico más altamente calificado y la enfermedad se haya diagnosticado correctamente y que se le haya recetado el medicamento adecuadoInevitablemente, los sentimientos de los pacientes hacen una diferencia en la calidad y en su recuperación integral.

Incluso cuando nos involucramos en una conversación normal en la vida cotidiana, si alguien habla con sensibilidad humana nos agrada escucharlo y responder en consecuencia; toda la conversación se vuelve interesante, no obstante lo intrascendente que pueda ser el tema. Por otro lado, si una persona habla con frialdad o con dureza, nos sentimos inseguros y queremos terminar rápidamente con la interacción. Desde el menos al más importante evento, el cariño y el respeto de los demás son vitales para nuestra felicidad.

Recientemente conocí a un grupo de científicos en Estados Unidos que dijeron que la tasa de enfermedades mentales en su país era muy alta - alrededor del 12 por ciento de la población. Se hizo evidente durante la discusión, que la principal causa de la depresión no era por la falta de bienes materiales, sino una privación del afecto de los demás.

Como pueden observar de todo lo que he escrito hasta ahora, una cosa me parece clara: si estamos o no conscientes de ello, desde el día en que nacemos, la necesidad de afecto humano existe en nuestra propia sangre. Incluso si el afecto proviene de un animal o de alguien que normalmente consideramos un enemigo, tanto los niños como los adultos gravitarán espontáneamente hacia éste.
Creo que nadie nace libre de la necesidad de amor. Y esto demuestra que, aunque algunas escuelas de pensamiento moderno tratan de hacerlo, los seres humanos no pueden ser definidos como exclusivamente físicos. Ningún objeto material, aunque sea bello o valioso, puede hacer que nos sintamos amados, porque nuestra identidad más profunda y carácter verdadero se encuentran en la naturaleza subjetiva de la mente.

DESARROLLANDO COMPASIÓN

Algunos de mis amigos me han dicho que, aunque el amor y la compasión son maravillosos, que en realidad no son muy relevantes. Nuestro mundo, dicen, no es un lugar donde esas creencias tengan mucha influencia o poder. Afirman que la ira y el odio son una parte tan importante de la naturaleza humana que la humanidad siempre será dominada por éstos. No estoy de acuerdo.

Nosotros, los humanos hemos existido en nuestra forma actual desde hace unos 100,000 años. Creo que si durante este tiempo la mente humana hubiera estado controlada principalmente por la ira y el odio, nuestra población total habría disminuido. Pero hoy, a pesar de todas nuestras guerras, nos encontramos con que la población humana es mayor que nunca. Esto indica claramente para mí, que el amor y la compasión predominan en el mundo. Y esta es la razón por la cual, los acontecimientos desagradables son noticia; y ya que las actividades compasivas forman parte regular en la vida cotidiana, esto se da por sentado y por lo cual en gran medida éstas son ampliamente ignoradas.

Hasta ahora he estado hablando sobre todo los beneficios mentales de la compasión, pero ésta contribuye también a la buena salud física y según mi experiencia personal, la estabilidad mental y el bienestar físico se relacionan directamente.  Sin lugar a dudas, la ira y la impaciencia nos hacen más susceptibles a los padecimientos. Por otro lado, si la mente está tranquila y ocupada con pensamientos positivos, el cuerpo no será presa fácil de la enfermedad.

Pero, por supuesto, también es cierto que todos tenemos un egocentrismo innato que inhibe nuestro amor por los demás. Así que ya que el deseo de la verdadera felicidad se produce sólo con una mente en calma, y 
esa paz de la mente se produce sólo con una actitud compasiva, ¿cómo podemos desarrollar esto? Obviamente, no es suficiente que simplemente pensemos: ¡Que linda es la compasión! Tenemos que hacer un esfuerzo coordinado para desarrollarla, debemos utilizar todos los acontecimientos de nuestra vida diaria para transformar nuestros pensamientos y nuestro comportamiento.

Traducido al español por Lorena Wong.


------------------------------ -------------------------
 
Tsewang PhuntsoOficial de Enlace para America Latina
OFICINA DEL TIBET
241 East 32nd Street
New York, NY 10016

Telefono: (212) 213 5010 extn. 11
Fax: (212) 779 9245
Email: phuntso@igc.org

Por más información sobre Tíbet en español, por favor visite nuestro sitio web www.tibetoffice.org/sp o subscríbase a nuestro boletín "Noticias del Tíbet", escribiendo a la dirección indicada más arriba.